La Máquina del Tiempo y el Edén.

 

La Máquina del Tiempo y El Edén




H. G. Wells escritor británico publica en 1895 su libro “La Máquina del Tiempo” en el cual nos cuenta las aventuras de un científico que crea una máquina para poder viajar a través de las eras y su primer impulso es viajar hacia el futuro y conocer sus maravillas… las maravillas se transformaron en pesadillas: guerras, falta de inteligencia, existencialismo, canibalismo, hedonismo, etc. La idea no es hacer un relato del libro sino que tomar una parte relevante del relato para ver el tipo de sociedad con la que se encuentra en su viaje hacia el año 802.701 y que nos hace un paralelismo con lo que pudo haber sido el verdadero Edén…

Dos razas los Eloi y los Morlocks, los primeros son personas muy hermosas, frágiles, sin mucha fuerza, de piel blanca y rubios, su inteligencia es muy básica, tienen un idioma pero no escritura, se alimentan de los frutos que provee la naturaleza, disfrutan de los placeres del cuerpo, tienen miedo a la oscuridad y viven en la superficie del planeta, los Morlocks en cambio son fuertes, de ojos grandes, cabello largo, piel cetrina y su forma asemeja a una criatura de aspecto arácnido, viven en el subsuelo en cavernas con máquinas de un esplendor pasado que los ayudan a mantener su existencia, se alimentan de carne… carne que obtienen al cazar a los Eloi.

Cuando se describe el Edén se nos cuenta de un lugar, un paraíso donde no hay hambre, los humanos existentes se alimentan de los frutos que da la tierra, y si, hablaremos de más que un Adán y una Eva, hablaremos de ellos considerando que eran una gran tribu encerrada en este lugar misterioso. Temían a la oscuridad (al igual que los Eloi); cuando Adamitas y Evanitas fueron expulsados del paraíso se encontraron con que el mundo tenía día y noche. Se les tenía prohibido comer del árbol del conocimiento, solo se les permitía existir y disfrutar (ídem Eloi). En el Edén nunca se describe que pasa con las personas llegado cierto tiempo, no se sabe si mueren o si llegan a la vejes, se decía que no se moría en ese lugar, ¿pero era así?...

Al carecer de conocimientos, al no practicar la inteligencia, al no transformar lo anterior en sabiduría una persona se convierte en un ser vulnerable y no puede discernir si lo que ocurre a su alrededor y a su propia persona es lo que debiese, debería o debe pasar, puede convertirse en un objeto de uso en todo o en muchos sentidos. Se sabe que en la pirámide alimenticia los seres humanos no están en la cúspide, hay entidades que se alimentan de la energía que emanamos. La gran “falta” de Adán y Eva fue comer del árbol prohibido lo que provoco un cambio en su comportamiento, se dieron cuenta de su propia existencia (SOY) y que algo ocurría en el supuesto paraíso. Creo que sería algo estúpido irse de un lugar donde lo tienes todo, salvo que te des cuenta de que algo no encaja y que ese algo ponga en peligro tu existencia ahora que se es consciente de sí mismo; darse cuenta de si mismo nos da como regalo lo que llamamos “libre albedrío”, este regalo esta marcado a fuego en nuestro código genético, ya de por si las células buscan su preservación, sea por conservación o expansión, a lo que voy es que es algo natural buscar trascender y que lo que les ocurrió a los Elois-Adamitas-Evanitas es una inhibición atenuada de este sentido de preservación en post de servir como “alimento” a otras entidades. La preservación del ser va a consistir en un camino que pasa por distintos estados de existencia buscando un tono, una vibración.

Actualmente existe un movimiento político que busca este paraíso… El Comunismo va hacia y su fin es el hedonismo, la búsqueda del placer evitando a toda costa el dolor o sufrimiento, la ignorancia es la herramienta para conseguir este fin. Es necesario entender que la naturaleza en si se mueve en el dualismo de bueno-malo, negativo-positivo, alegría-tristeza, placer-sufrimiento, primavera-otoño, invierno-verano, etc, todos estos dualismos complementarios son procesos de entendimiento que nos hacen experimentar la existencia, cuando niegas uno la balanza se desequilibra, la preservación y viaje hacia algo más se trunca impidiendo recuperar lo que es debido. Tal vez lo que se cuenta en el Génesis de la Biblia no sea solo un principio… es un fin también.

En resumen ¿qué es y cuál es el punto de todo esto?, la respuesta sería ser conscientes de nuestra existencia y la labor que decidimos con esta. Henos aquí en este universo o múltiples universos para experimentar lo que se nos ofrece, apreciar algo que perdimos y que venimos a buscar. El fuego de Prometeo no es un regalo, es el despertar de un recuerdo.

Como punto ultimo hay que mencionar las dos películas que se basan en el libro y su merito en entregar un complemento al relato. La primera de 1960 básicamente es un muy buen resumen de la historia sino se desea leer el libro y la segunda película del año 2002 agrega algo más variando un poco: los Eloi tienen una sociedad menos despreocupada, más conscientes de ellos mismos y su entorno, son cazados igualmente por los Morlocks, pero con una diferencia, dentro de los Morlocks hay una casta que desarrollo su mente y junto con ello poderes mentales los cuales utilizan para dominar a la casta inferior y dominar a los Eloi. El protagonista de la historia se encuentra con uno de los lideres de esta casta y le cuestiona el tipo de sociedad que se ha formado con el pasar del tiempo y este Morlocks le responde que quien es él para cuestionar años de “evolución”, a su vez le hace ver que el ingenio humano adolece de una pregunta que los ha llevado a hacer cosas increíbles y trágicas: “¿Y si…?”, al final le da a entender que por fin en el año 802.701 han logrado encontrar un equilibrio dentro de un Ouroboros... El protagonista en si es Prometeo o la serpiente del paraíso si se quiere, aquel que ha adquirido la facultad de entrar al “no tiempo”, el que descubrió las runas, el que viaja entre eras para entregar la chispa olvidada y recordarnos que este Edén es un espejismo.

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